lunes, 15 de octubre de 2007

Reflexiones sobre el amor en Internet

Querida Ana:

Es curioso realmente el tema este de Internet. Una cosa de la que me he dado cuenta, es de que, por lo menos para mí, es más duro de lo que parece. De hecho, ahora mismo me he apartado un poco de la "Red", precisamente porque me estaba empezando a agobiar un poco, bueno un poco bastante. Creo que en los encuentros estos, por lo menos en páginas como Match o Meetic en concreto, dejando aparte las de encuentros más eróticos, digamos, donde se supone que está más claro el fin que se persigue, hay involucrado un gran nivel de expectativas emocionales, mucho más de lo que la gente cree.
En definitiva, resulta bastante más estresante sentimentalmente hablando de lo que parece. Como siempre, cuando uno cuenta estas cosas en un bar, le pone bastante "cuento" y una cierta frivolización al tema, pero cuando has tenido unas cuantas experiencias con el tema, te vas dando cuenta de que tanto uno mismo como las mujeres con las que se cruza, llegan a este sistema después de bastantes meses o incluso años de buscar una "conexión" y, generalmente se trata de tíos y tías de treinta y tantos o más años, con una importante ruptura sentimental a la espalda.
Con el corazón un poco o bastante jodido y muchas veces, incluso con uno o más hijos a la espalda. En definitiva, cuando quedas con una mujer a través de este plan, y a los demás tíos supongo que también les pasará, te puedes encontrar con varias opciones

1) que los dos, después de algunos emails un tanto esperanzadores, sientan una mutua indiferencia y la cosas quede en unas cañas y punto. Pero ese "y punto" no lo es tal, ya que a fin de cuentas te "esperabas" algo más y no lo has encontrado. Con lo cual hay un cierto grado de decepción que no te deja indiferente.

2) Que los dos se sientan atraídos y tengan un rollo muy “ideal”, ese fue mi caso inicialmente con Natalia, hace varios meses ya, y que luego todo quede en esa noche. En ese caso, uno de los dos después de una o dos citas se aleja del rollo y el otro se queda con una imagen muy “idealizada” de esa persona. Lo digo porque la chica con la que quedé una noche en Segovia me pareció muy fascinante, interesante, sexy etc. etc. , pero a fin de cuentas todos se quedó en muchos correos electrónicos, un par de llamadas, y sobre todo una noche de cena, copa y sexo apasionado y desatado. A fin de cuentas, como no iba a ser “desatado” si, probablemente, en la mente de Isabel esa era la primera y única noche. En ese caso, yo creo que uno de los dos “lo da todo” como se suele decir, pero lo da una vez.
A mí otro día me pasó un poco lo mismo con una chica llamada Elvira, solo que al contrario. O sea fue ella la que me idealizó por una primera cita muy “intensa” y porque descubrimos nuestra pasión común por Antonio Gamoneda. Resulta que ella tenía un pos-it en la pared con el nombre de Antonio Gamoneda, resulta que estaba buscando un libro suyo porque había ido a verle a un recital. Mira, y esto es muy cinematográfico. Resulta que en el único libro que encontró aparecía no aparecía un poema de amor suyo que a ella le había impresionado mucho. Total que al día siguiente le mandé por correo el poema al que yo pensaba que se refería y.. era justo ese. Total que en ese caso, ella me idealizó mucho por el tema del sexo (que yo no encontré tan maravilloso) y por la casualidad esa del poema.
Resumiendo, yo “dejé” digamos a Elvira, porque tampoco me interesaba mucho e Natalia pasó de mí por alguna razón que desconozco. Como dice mi psicoanalista, hay que pensar que también te puedes cruzar con “tiburonas” en la red, tías muy fascinantes y narcisistas que están ahí para ligar pero no para llegar a algo más.
En definitiva, si quieres un día te cuento estas historias con más detalle, por no hablar de la de la griega… que esa si que es para descojonarse, de mí sobre todo. Pero, aunque te parezca una tontería, la verdad es que esta historia me estaba desconcertando bastante.
Es un poco lo que decíamos el otro día en Barcelona. Uno se separa, lo pasa muy mal y después de un tiempo quiere volver a retomar su vida sentimental, a se posible a un alto nivel de “perfección”. Entonces trata de “bajarse” de la red a una tía que tenga todas las características que te encantaban de tu anterior, o anteriores parejas, belleza, inteligencia, edad, estado civil, con o sin hijos, alta, baja, morena, rubia, y espera que todo vaya “rodado”.
La realidad, por lo menos en mi caso, quizás porque a fin de cuentas tampoco sirvo para esto, es que después de un tiempo acabé muy despistado, con un grado considerable de ansiedad y excitación, esperando todos los días a ver qué tía me había contestado, cual me había enviado un “guiño”, escribiendo correos todas las tardes. En definitiva, gastando una energía emocional realmente considerable que al final te acaba desgastando bastante.
Entonces, al final estás como los caballeros andantes en busca del Grial… esta no, porque no me gusta demasiado, esta tampoco, porque pasa de mí, esta me la tiro y paso de ella, esta se me tira y pasa de mí, esta no se parece nada a lo que me imaginaba.
Al final puede llegar un punto (por lo menos en mi caso me ha pasado) en que vives en gran medida en una irrealidad, metido en una especie de mercado inagotable pero insatisfactorio de “chicas”.
Te explico un poco mi experiencia por si te sirve de algo porque yo creo que al final, detrás de toda esta historia hay bastante soledad y bastante búsqueda de “quimeras” (que por definición son inalcanzables). Es curioso porque además te metes un poco en una vorágine de emails, citas, tías a las que llamas, tías que te llaman y se complica mucho.
Supongo que depende mucho de cómo seas tú, claro. Pero la realidad insoslayable es que, o te lo tomas con mucha calma y muy pocas expectativas, lo cual por definición es bastante difícil a no ser que tengas la piel muy gruesa, o acabas sufriendo por tías por las que no deberías sufrir y por otra parte haciendo sufrir a tías que se crean toda una serie de expectativas en torno a ti, que te ves incapaz de cumplir.
No sé si te servirá de mucho mi análisis pero al final la impresión que te queda de una aventura de estas es un poco jodida. Pero claro que eso depende mucho de cómo vivas las relaciones y el amor y esas cosas. Yo creo que, en general, te acelera bastante y te impide en cierto modo vivir un día a día un poco normal, hacer tus cosas, pasar tiempo en cosas que te interesan y todo eso porque estás continuamente con el “chip acelerado” de la “búsqueda”.
Bueno, en cualquier caso te mando estos comentarios a ver si te suscitan alguna idea. Yo, por ahora me he apartado un poco de esta historia.

Hablamos,

Besos


Jaime

8 comentarios:

Lorelay dijo...

Vaya, vaya, buscando de este tema llegue a este blog, está muy buena tu reflexión, no sé si a Ana le servirá tu analisis , pero a mi sí, sobre todo me queda en mente esta frase..."se gasta una energía emocional realmente considerable que al final te acaba desgastando bastante"... Creo que eso es justamente lo que me ha estado ocurriendo :( , creo que haré igual que tú... alejarme de la red
Cariños desde el sur del mundo
Lore

...flor deshilvanada dijo...

Será por eso que me defiendo tanto??? Se gasta energía y es un amor como el que se vive en la vida real... No sé, en ciertos casos me alejo, porque tengo miedo de sufrir...

Un beso Raúl!

Marcela dijo...

Jaime:
Lo leí en tu allá, pero te dejo el comentario aquí.
Leí esta carta varias veces, y se la mostré a algunos amigos. Lo que me parece valioso es que pones un ejemplo concreto y expones tu conclusión, sobre todo el estado emocional en que te deja. Creo que eso es más valioso que los ejemplos en tercera persona o un texto informativo con estadísticas ;-)
Creo que entiendo eso del “desgaste emocional”. Si pasas mucho tiempo y un día pareces despertar al hecho de que todo está a tu alrededor, y es hasta posible que hayas dejado pesar cosas, que las cosas se acumulen, y te sientas abrumado. A mi me pasó eso. Lo bueno es que uno se queda con ganas de no volver a pasar por eso. De palabra todos somos más lindos. Las relaciones se construyen en presencia no en ausencia. ¿no?
Saludos

Anónimo dijo...

Me ha resultado muy clarificadora e interesante esta carta.
A lo "tonto" me has ahorrado una sesión de psicoanálisis ^-^
Gracias.

raulquintana67 dijo...

Muchas gracias Pipilota, lástima que no pueda entrar en tu blog si es que lo tienes, para comentarte. Me alegro de habertes ahorrado una sesión de psico. Yo, de hecho no me la ahorro, porque voy todas las semanas, jaja. un beso

raul

raulquintana67 dijo...

Muchas gracias Pipilota, lástima que no pueda entrar en tu blog si es que lo tienes, para comentarte. Me alegro de habertes ahorrado una sesión de psico. Yo, de hecho no me la ahorro, porque voy todas las semanas, jaja. un beso

raul

Pipilota dijo...

Perdone usté mi inicial recato.
Mi blog es tal vez demasiado bitácora, no es necesario que comentes. Queda hecha la invitación, pero no esperes gran cosa 6_6
Además estoy declarada en stanby :D

Y ya que vas al psico todas las semanas, digo yo... comparte sabidurías a ver si les demás nos seguimos ahorrando algo ;P

M.G.G. dijo...

De vez en cuando, cuando tengo unos minutos libres, entro a leerte y como no has actualizado, me doy una vueltecita por tu casa y mira tú por dónde, hoy he encontrado algo muy interesante: "Reflexiones sobre el amor en Internet", un tema muy interesante, y me ha gustado, una vez más, como lo cuentas, como te pones de ejemplo y narras tu experiencia. No sé Ana qué pensará de tu reflexión, pero es muy buena...
Bueno, no sé si sigues "apartado" todavía, pero de cualquier forma, te deseo mucha suerte :))
Besos cibernéticos ;)